. . .

Ven junto a mi a pesar de la distancia
corre tomando mi alma
usala como la puerta de un inextricable y agudo grito de esperanza.

Protege mis pasos para escapar del abismo de tu silencio
donde no quiero cosa distinta a la eterna libertad
solo deseo grabar tu gélida partida a un mundo llamado realidad.

Y cuando en verdad me mires a los ojos
descubriras un tenue pasaje hacia mi moribunda soledad.

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