Amor sexual

Deja que mis lagrimas naden en el mar de tus piernas
como si fuera el sudor quien alimenta tu majestuosa feminidad
invitame a entrar en tu cuerpo para refugiarme de un halo frigido de mi inspiración
en esos instantes cuando no se como decirle a mi pluma que mis sentidos no me dejar avanzar
convierte tu algarabia en una rafaga sublime de alabanzas donde pueda resucitar mañana en la mañana
recostado en un lejano rincon de tu cama.

No hay comentarios:

Publicar un comentario